Establecer metas III - Parte 1

Paso 2: Trazar una meta

Las metas que están claramente definidas como un comportamiento te ayudan a mantenerte centrado para lograr lo que quieres en la vida. El Test de regulación de la conducta que rellenaste te ayudará a identificar algunas metas en las que tienes que trabajar.

El paso más importante para trazarse una meta es definiendo la meta de manera que específicamente describa un comportamiento. Por ejemplo, puedes tener la meta de querer "manejar mi dinero". Esta es una meta muy admirable, pero esa meta es una meta muy vaga y no describe qué comportamientos tienes que lograr. Date cuenta de que vas a describir un comportamiento que vas a hacer (como escribir la cantidad de dinero que te  gastas al mes), no hablando de un comportamiento que vas a dejar de hacer (como hacer compras compulsivas). Por lo tanto, vas a tener que enumerar algunos comportamientos que vas a realizar cuando estés comiendo una dieta saludable. Por ejemplo sabemos que los nutricionistas recomiendan comer 5 porciones de frutas y vegetales al día. Escrito de manera conductual y específica tu meta sería "comer una dieta más saludable que incluya 5 frutas y vegetales al día".

Para cada meta, hazte las siguientes preguntas y escribe las respuestas.

1.- ¿En qué me voy a beneficiar si logro esta meta?

2.- Esta meta, ¿es realista o alcanzable?

3.- ¿Vale la pena que dedique tiempo y energía a esta meta?

4.- ¿Qué acciones tomaré para alcanzar esta meta?

Paso 3: Desarrollar un plan de acción - Dividir la meta en metas más pequeñas

Un plan de acción usando las habilidades de manejo que ya has aprendido- A veces puede ser de ayuda trabajar desde la meta hasta el primer paso. Asegúrate de usar el método de la tormenta de ideas que aprendiste en el manejo de problemas. Es la manera más efectiva y divertida de resolver el problema.

Ejemplo:

Mi meta general: Quiero manejar mi dinero arreglo a un presupuesto que incluya un balance entre mis ingresos y gastos.

Después de haber decidido tu meta en general, necesitas pensar en metas más pequeñas, es decir, metas que tendrás que alcanzar antes de lograr una meta más grande. Anota las metas más pequeñas que te llevan a la meta general. Una manera de pensar en esto es la de llamar a tu meta general, meta a largo plazo y a las pequeñas, metas a corto plazo. Asegúrate de que cada meta a corto plazo sea realista y que la puedas medir. Tendrás que decidir qué acción o acciones serán necesarias para conseguir los dos tipos de meta, tu meta general y las más pequeñas. También ayuda pensar en los posibles obstáculos que puedan interferir en conseguir la meta. Saber que puede haber obstáculos en tu camino te permite estar preparado y no cogerte desprevenido. Finalmente, piensa cuanto tiempo tardarás en llegar a la meta.

Primera meta a corto plazo:

Anotaré cada cantidad de dinero gastada en la semana

¿Cómo me ayudará cumplir esta meta?

Me sentiré más seguro financieramente?

¿Es esta meta realista o alcanzable?

Si, puedo hacerla.

¿Vale la pena gastar tiempo y energía en alcanzar esta meta?

Sí, me hará sentir que controlo más mi dinero.

¿Qué acciones tengo que hacer para alcanzar esta meta?

Necesitaré una libretita y un bolígrafo para llevar conmigo en todo momento.

¿Existen obstáculos para alcanzar esta meta?

Encontrar una libretita que ya tengo o acudir a una tienda a comprar una. Recordar llevarla siempre conmigo y recordar anotarlo todo.

¿Cómo sabré que he alcanzado mi meta?

Al final de la semana podré ver todas las cosas en las que me he gastado dinero y cuánto cuesta cada cosa.

Paso 4: Imaginándote el éxito (conseguir la meta)

Si alguna vez has observado a un músico, o a un atleta, o aun gimnasta o a un nadador; te habrás dado cuenta que ellos no se sientan enfrente del piano e inmediatamente comienzan a tocar o se tiran inmediatamente al agua. Estos músicos o atletas generalmente se sientan o hacen una pausa durante un minuto o dos con los ojos cerrados antes de comenzar su actividad.Esto es porque se les ha enseñado a visualizar el éxito antes de alcanzarlo. Puedes usar la misma técnica cuando comiences a trabajar para lograr las metas que te has trazado.

En la habilidad de Distanciamiento, una de las técnicas que aprendiste fue la respiración para relajarte. Esta es una habilidad que, junto con la visualización, resulta muy útil. Comienza cerrando tus ojos y respirando despacio por la nariz y exhalando por la boca, tomándote tu tiempo. Después de haber tomado varias respiraciones profundas, es hora de que te comiences a imaginar "como si hubieras logrado tu meta". Trata de crear esa imagen lo más detalladamente que puedas. Debes hacer estas preguntas:

¿Qué haré cuando alcance mi meta?
¿Dónde estaré cuando alcance mi meta?
¿Quién más sabrá que he alcanzado mi meta?
¿Qué es lo que las personas notarán cuando haya alcanzado la meta?

Paso 5: Superar la idea :" Dejar las cosas para más tarde"

Hay varios "trucos" que te ayudarán a seguir los pasos que has enumerado:

1.- Escribe un contrato contigo mismo, incluyendo la fecha en que esperas lograr cada paso.
2.- Haz un contrato con un miembro del equipo de refuerzo para lograr la meta dentro de un tiempo específico.
3.- Comienza poco a poco.
4.- Desarrolla un sistema de recompensa realista y con sentido común para cada paso y meta.
5.- Reta los pensamientos negativos.
6.- Hazte responsable de cada retraso.
7.- Después de un paso difícil haz una actividad agradable.
8.- Trata de conseguir las metas a corto plazo de una en una.
9.- Pon una copia de tus metas y pasos a seguir en un sitio visible (por ejemplo la nevera).
10.- Planea tiempo para relajarte y divertirte.
11.- Préstale toda tu atención a la actividad que estés realizando (mantente en el presente).
12.- Dispón tu ambiente (lo que te rodea) para que te ayude a lograr cada paso.

Paso 6: Evalúa tu progreso y ajusta tus metas de acuerdo a la evaluación del progreso

Revisa el progreso y ajusta tus metas de acuerdo a los obstáculos que has encontrado. Luego repite el proceso desde el paso 1.